El domingo fuimos al cumpleaños de un ser querido y conocimos a sus otros seres queridos y reimos tanto tanto tanto como hace mucho no lo hacíamos, J. no se sintió bien, el ponche estaba demasiado rico y bebió en exceso, pero estaba feliz y yo esa noche, al llegar a casa dormí, pesado y profundo como hace tiempo no lo hago, repetimos los buenos deseos para P., salud y gracias por invitarnos!
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¿Comentar dos veces es el equivalente blog de ver doble? ¿Sigue la borrachera?
ResponderEliminarYo tambien fui un domingo a un cumpleaños donde había un riquísimo ponche, que supe tomar con moderación a pesar de ser mi primera vez con el frutal líquido.
ResponderEliminarY yo tambien la pasé lindo.
Y me encantó que cuando me iba, me elogiaron el poncho que llevaba puesto.
Era alguien a quien no conocía, pero evidentemente, ademas de ser un bombón, tenía muy buen gusto...
Besos