" Donde hay putos hay puterío!!", berreaba el transformista hiperobeso en la presentación de su "show", una copia barata de Alfredo Casero disfrazado de mujer, lo cual ya era notable, por que el transformista suele ser una copia barata de algo, pero éste era la copia de una copia de una copia. El colmo. Y seguía asi: "Donde hay un puto hay un Ego gigante, donde hay dos putos hay cien Egos gigantes, donde hay tres putos hay millones de Egos y donde hay mas de tres ni te podés imaginar lo que pasa. Pero sobre este escenario somos todos laburantes!". Menos mal que lo aclaró por que ya no nos daba la cabeza para seguir la progresión matemática de los Egos que había en ese escenario. El "show" fue lo mas esperable del mundo o incluso algo peor. Playbacks pobrísimos, y pobrísimas imitaciones de Susana Gimenez, Valeria Lynch o Liza Minelli (btw: el gordo se disfrazó de Liza pero puso la versión de Mein Herr de Natasha Richardson: WTF!) En fin, que eso no era lo importante, nadie estaba disfrutando del espectáculo. Nos divertimos a la salida haciendo cuentas de cuantos Egos habíamos visto esa noche, incluidos los nuestros, y llegamos a una cifra imposible.


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no alcansaria ni una HAL9000 haciendo la sucesion de fibonacci dias enteros para calcular esa cifra...
ResponderEliminaro es que se volveria psicotica y mataria a alguien!
en fin! que groso kubrick!
¿Que linda nochecita, no?
ResponderEliminarYo conoci a una tal Coco malisima como pocas, pero querible como un osito.
Saludos
Garras
tristremendo!
ResponderEliminar(triste + tremendo)