Di Benedetto

Como un principio de ordenamiento ha empezado por numerar las páginas y ha pulsado la ele minúscula, que da el uno. Pues le ha salido repetida, como duplicada, no tan separados los signos que representen el once, sino dos líneas oblicuas finas, muy juntas, que lo parecen.
Tiene que ser una señal de su tormento: que él no querría ser uno, sino dos, y el uno doble es once pero también es uno-uno.
A fin de no ser él solo, sino ser él y el otro, y que el otro actuara por él (¿trabajara por él?) y él tuviera en quien cargar responsabilidades, sobre todo las morales, que son las que mas pesan. Que las culpas las tuviera el otro.


De "Sombras nada mas" de Antonio Di Benedetto - Alianza Editorial - 1984

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Datos personales

Seguidores

Contacto

estodotodo@yahoo.com.ar

Archivo

Etiquetas

Powered By Blogger
[Valid Atom 1.0]